Seguridad psicológica en el trabajo: una estrategia para transformar la cultura organizacional 

(San José, 21 de mayo de 2025) La más reciente sesión del Foro de Capital Humano y Futuro del Trabajo de AmCham analizó se destacó cómo la seguridad psicológica se convierte en un habilitador clave de bienestar, productividad y compromiso.  

Cuando los equipos se sienten seguros para opinar, preguntar, cuestionar o incluso fallar sin temor, se crean condiciones óptimas para el aprendizaje continuo y la innovación. 

Se abordaron temáticas como las siguientes: 

Promover el bienestar emocional para alcanzar el alto desempeño 

• La seguridad psicológica permite que las personas se expresen sin temor a represalias, juicios o consecuencias negativas. 

• Favorece entornos donde se fomenta la confianza, la colaboración y la apertura al aprendizaje. 

• Es una condición fundamental para impulsar la innovación, el sentido de pertenencia y la resiliencia organizacional. 

Modelo de cuatro etapas: construir paso a paso una cultura segura 

• Inclusión: Sentirse parte del equipo y valorado por quienes lo integran. 

• Aprendizaje: Poder hacer preguntas o admitir desconocimiento sin sentirse vulnerable. 

• Contribución: Expresar ideas únicas y perspectivas distintas sin temor a ser ignorado. 

• Desafío: Cuestionar decisiones o sugerir mejoras ante figuras de autoridad en un entorno respetuoso. 

Romper con mitos comunes sobre el concepto 

• No se trata de evitar conflictos, sino de enfrentarlos con madurez y respeto. 

• No es responsabilidad exclusiva del líder; todo el equipo debe contribuir a un entorno seguro. 

• No es lo opuesto a la exigencia: la confianza permite alcanzar estándares más altos con mayor compromiso. 

El liderazgo vulnerable como catalizador del cambio 

• Líderes que reconocen errores, solicitan retroalimentación y expresan dudas fortalecen el vínculo con sus equipos. 

• Mostrar humanidad en el liderazgo promueve relaciones más auténticas, empáticas y efectivas. 

• Esta apertura fomenta una cultura organizacional más transparente, flexible y enfocada en el crecimiento. 

Aprender del error: clave para la innovación y la mejora continua 

• Hablar de errores y analizarlos colectivamente permite convertirlos en aprendizajes valiosos. 

• Estructurar espacios como “lecciones aprendidas” o “revisiones posteriores a la acción” fortalece la toma de decisiones. 

• La cultura del aprendizaje desde el error evita repetir fallas y promueve una actitud de mejora continua. 

Medición y retroalimentación: dos pilares para la sostenibilidad del proceso 

• Herramientas como encuestas de pulso o autoevaluaciones ayudan a detectar puntos ciegos en la cultura del equipo. 

• La retroalimentación frecuente permite ajustar comportamientos y reforzar la coherencia organizacional. 

• Medir el avance promueve la rendición de cuentas y el desarrollo constante del liderazgo. 

Adaptabilidad cultural e implementación en entornos híbridos 

• La forma en que se expresa la seguridad psicológica varía según el contexto cultural y el formato de trabajo. 

• En entornos híbridos o virtuales, es clave fomentar espacios individuales de confianza y reuniones más participativas. 

• Seleccionar bien a los participantes, facilitar el diálogo y establecer rituales comunes refuerza la seguridad emocional. 

El foro concluyó con una sesión interactiva en la que representantes de diversas empresas compartieron sus experiencias, desafíos y avances en la construcción de entornos psicológicamente seguros. Se destacó la importancia de integrar estas prácticas desde la alta dirección y adaptarlas a la realidad de cada organización.