Impacto global y local: ¿Cómo prepararse ante el nuevo escenario económico y de tipo de cambio?
(San José, 4 de junio de 2025) En la reciente sesión del Foro de Economía y Finanzas de AmCham, se analizaron las perspectivas macroeconómicas nacionales e internacionales con énfasis en los efectos que podrían derivarse del nuevo entorno comercial internacional y la evolución del tipo de cambio.
La presentación estuvo a cargo de José Luis Arce, director de FCS Capital, quien compartió un análisis detallado de los factores externos e internos que configuran el actual escenario económico y financiero.
Los temas más relevantes abordados fueron:
Panorama internacional: desaceleración y riesgos comerciales
- La economía global enfrenta un nuevo shock negativo impulsado por el endurecimiento de la política arancelaria en Estados Unidos, lo que incrementa los costos de importación, disloca las cadenas de suministro y ralentiza la producción.
- A pesar de cierta estabilidad en precios de materias primas y señales de menor inflación, se espera un crecimiento global más lento durante los próximos 24 meses.
- La Reserva Federal podría aplazar la reducción de tasas de interés, debido a presiones inflacionarias temporales derivadas de los nuevos aranceles.
- El impacto en América Latina incluye menos demanda externa y mayor incertidumbre en la inversión.
Efectos para Costa Rica: vulnerabilidades y oportunidades
- La economía nacional, por su apertura comercial, será sensible a la caída en exportaciones y servicios como el turismo.
- La incertidumbre internacional podría afectar decisiones de inversión extranjera directa en sectores clave.
- Sin embargo, los menores precios de materias primas pueden beneficiar a consumidores y empresas, al reducir costos operativos y compensar parte del efecto negativo sobre el ingreso.
- Aranceles diferenciados podrían crear ventajas puntuales para ciertos productos costarricenses frente a sus competidores en Asia.
Tipo de cambio: proyecciones de ajuste moderado
- Se anticipa una depreciación moderada del colón, producto del menor crecimiento global y la reducción de flujos externos.
- Esta depreciación actuaría como amortiguador ante el shock externo y no se prevé que supere los ₡530 por dólar.
- Factores estructurales como el superávit en bienes y servicios, una inflación doméstica más baja y la diversificación exportadora mantienen un tipo de cambio competitivo.
- El rol del Banco Central, incluyendo la intervención con el sector público no bancario, será clave para mitigar fluctuaciones abruptas.
Condiciones fiscales y monetarias: espacio para maniobra
- La situación fiscal presenta señales mixtas, con mayor gasto y un leve deterioro en el balance primario, aunque en mejor condición que años anteriores.
- El Banco Central mantiene reservas internacionales sólidas, lo cual permitiría sostener la estabilidad macroeconómica frente a presiones externas.
- Se prevé que, si la desaceleración económica se profundiza, exista margen para una política monetaria más flexible hacia finales del año.
Recomendaciones para el sector empresarial
- Empresas exportadoras deben anticipar menores volúmenes y adaptar sus estrategias ante nuevas condiciones de demanda.
- El sector de servicios tecnológicos se mantendría más estable, pero otras actividades como el turismo podrían verse más afectadas.
- Es recomendable valorar herramientas de cobertura cambiaria, cuyo uso en el país sigue siendo limitado pero necesario ante escenarios volátiles.
El foro concluyó con un llamado a las empresas afiliadas a mantener una lectura estratégica del entorno económico, ante la combinación de riesgos externos y presiones internas que afectan la dinámica comercial y cambiaria. Se destacó que, si bien Costa Rica cuenta con fundamentos macroeconómicos relativamente sólidos, será esencial fortalecer la planificación financiera, monitorear activamente las condiciones cambiarias y prepararse con agilidad para capitalizar las oportunidades que puedan surgir del nuevo reordenamiento comercial internacional.